Destylou - Trucos Caseros

En las cadenas, pulseras, gargantillas y piezas que son difíciles de limpiar: las pones en un vaso o un bol, cualquier recipiente con agua y añades jabón líquido. Lo dejas toda la noche o todo el día, las vas sacando y les das con un cepillo de dientes para que te sea más fácil y verás que sorpresa te llevas. Lo puedes hacer con todas las piezas de oro que tengas.

Coges un cepillo de dientes y le echas pasta dental, después la quitas con un algodón y tu oro recuperará su brillo. No te aconsejo que lo hagas con piezas muy elaboradas, ya que te puede costar quitar la pasta. Es mejor hacerlo con anillos (sin pasarlo por las piedras) y otras piezas grandes. Es importante que sepas que no debes de usar el cepillo con ninguna otra cosa que no sea: agua y jabón o pasta de dientes, también intenta hacerlo con uno blandito, suave.

Con cebolla, exprime el jugo de una cebolla (trituradora, licuadora, exprimidor) en un recipiente y añade un poco de agua, las dejas unas cuantas horas, las retiras y enjuagas con agua y un poquito de jabón y verás como quedan. El problema es que... como no te pongas guantes de latex o algo así, tus manos desprenderan un olorcillo a cebolla impresionante, así que ya sabes!

Bicarbonato, jabón y agua. Esta mezcla es una maravilla para limpiar las alajas. Una vez que las metas en el recipiente, las mueves durante un rato como si estuvieras haciendo un cocktail (pero con cuidado claro). Después las enjuagas con agua y si puedes las secas con un poco de serrín.